Mi amable vecino parte3
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Posted:Oct 1, 2018 9:51 pm
Last Updated:Apr 30, 2024 6:26 am
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El cosquilleo en mi vagina comenzaba a expandirse, y sin poderme controlar comencé a gritar de puro placer,.. mi vagina se cerraba apretando para no dejar salir esa rica verga, grande, gruesa, pero que se desplazaba con una facilidad y se movía muy rápido, el inclinó su cabeza para comenzar a morder mis pezones, mientras que cambió su ritmo,.. dejo de sacar su verga, la metió hasta el fondo para que yo comenzara a moverme, el solo presionaba su cadera contra mi cadera. Con toda su verga bien adentro, comencé a balancear mi cadera hacia adelante y hacia atrás, sentía como se deslizaba frotando mi vagina, y sentía esas descargas de energía. El seguía mordiendo mis pezones lo que me hacía estar más sensible. Entonces comencé a chorrear, con su verga adentro, mojando la toda, el se extremesia, y tensionada todo su cuerpo. Dejo descansar mis pezones para abrazarme y cargarme.
Sentía como mis pezones, frotaban su pecho. En esta nueva posición el comenzó a subirme y bajarme de manera rápida.. y nuevamente sentía como entraba y salía su verga rápido y de nuevo. Comencé a gritar y nuevamente, me chorreraba sobre el. El no dejaba de moverse.. y la descarga eléctrica era muy continua igual que el flujo de líquido vaginal. Rápido, duro, extremando sus testículos contra mis labios vaginales.
Después de un rato. Paro y solo me abrazó, pero mi vagina aún estaba sensible.. sin movernos, sentía dentro de mi vagina un pequeño movimiento, que aunque era pequeño, era muy placentero.
Después de unos minutos, caminó, aún cargandome, hacia unos de los sillones, a paso lento y muy torpe, pues tenía abajo los pantalones. Se acomodó para sentarse. Yo estaba muy cansada, aturdida, con sueño, y dormitaba en sus brazos. Su cuerpo estaba sudado, y hacia que se desprendiera un rico aroma, a musgo, tierra, cítricos,.. una combinación, fresca y energética.
El solo me abrazaba suave, con su verga a dura dentro de mi, aún dura, pero suave, sentía en mi interior como lograba moverse.
Después de un rato, retomando la conciencia, comencé a sentir, como sus manos acariciaban mis glúteos. Como se comenzó a acariciar mi ano.. Como llevaba sus dedos a su boca, para chuparlos, metía despacio su dedo índice,.. lo metía y lo sacaba, con su otra mano sostenía la presión en mi cadera. Por un momento sacaba un poco más su dedo, empujando la orilla de mi ano de forma circular, cada vez lo metía más, y lo movía, y movía su cadera, para meter y sacar su verga. Empezó a meter otro dedo, y a realizar la misma acción.. y el movimiento de su cadera empezó a ser un poco más rápido.
Levante la cabeza y separa un poco mi cuerpo de su pecho.. y comencé a mover mi cadera de adelante hacia atrás, El paro el movimiento y yo continúe mi balanceo, acariciando su verga con mi vagina, sentía como se frotaba mi clítoris con su piel, sentía sus dos dedos dentro de mi ano. Sentí como presionaban sus dedos en la parte interna del ano. Acerque mis tetas hacia su boca y comenzó a chuparlos.. todo era muy placentero, y disfrutaba hasta el más mínimo roce de piel..
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Mi amable vecino 2da. Pte.
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Posted:Sep 30, 2018 10:48 pm
Last Updated:Apr 30, 2024 6:26 am
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Me di la media vuelta y me sorprendió ver qué efectivamente el había visto la escena, pues también había reaccionado al intento de caída de las cosas. Apenado había reincorporado su cuerpo. Y se giró perdiendo al azar su mirada, 2o 3 sitios a la vez. Por alguna razón no me dio vergüenza, al contrario, me gustó, y mi cuerpo se sintió excitado. Regresé mi atención al lugar que estaba revisando. Entonces escuché la voz algo tartamuda de mi vecino:
- Es está tu bolsa?
Gire la cabeza, y vi que tenía mi bolso en sus manos. Contesté afirmando con la cabeza. caminé hacia el, tome el bolso y me senté en el sillón colocando el bolso sobre mis piernas, desnudas y comencé a buscar en el interior, revolviendo cosas. Pensaba en como a de ver visto mi panocha, mojadita, imaginaba la escena y eso me ponía más cachonda de lo que ya estaba. También imaginaba que tal vez eso le podía provocaría una erección, y para mí, no hay cosas más caliente que ver a un hombre en pans y con una erección. Entonces el también se sentó, a mi lado. Al sentirlo a un lado, comencé a sentirme más excita y por lo tanto nerviosa, y torpe. El se acercó más para ver en el interior, estendio su brazo y comenzó a meter la mano, para sacar algunas cosas que colocó en la mesita del centro, al mismo tiempo que acomodó su otro brazo, junto a mi, poniendo su mano junto a mi muslo. Rozando mi pierna. Yo sentía la piel de su mano, caliente, suave, eso provocó que mí vagina volviera a mojarse, a hinchadase, a ponerse nuevamente sensible. Empecé a fijar mi mirada en su mano, principalmente en sus dedos largos y delgados. Lo cual creo la fantasía de tenerlos dentro de mi, acariciando las paredes de mi vagina, rápido para provocarme orgasmos, eyaculaciónes, y correrme con sus dedos dentro de mi. Terminamos de revisar mi bolso, y no encontramos las llaves.
Me miró a los ojos y me dijo con una sonrisa.
-Creo que no están aquí las llaves. Algún otro lugar?
- La cocina- contesté, algo sorprendida.
Me levanté y pasé frente a él, para dirigirme a la cocina. Por mi mente paso la idea de seducirlo y cogermelo. La cocina es chica, algo estrecha, y la divide una barra de madera que cumple como desayunador. En la cual me podría subirme y acomodarme, para abrir mis piernas y que me hiciera una buena mamada, que me comiera mi vagina bien rico.. se podría acomodar bien para méteme los dedos al mismo tiempo que me chupa mi clítoris.. uff.. abrir bien mis piernas, y mi vagina para que me meta la lengua...mm.. ver cómo lo hace., Como me mira mientras juega con su lengua...como se moja su cara con mi jugó,... Como se lo traga. El se levantó y me siguió. Con toda la intención del mundo, nuevamente me incliné, pero esta vez me agache más, y con las piernas más separadas. Dejando a la vista gran parte de mis glúteos, y mi vagina.
Entonces escuché:... Que hace vecina?
Me gire para contestar; ... "Nada."
Vi a la cara a mi vecino, que por cierto es muy guapo, tiene los labios carnosos, un cutis muy cuidado.
Baje nuevamente la mirada al área genital. Y solo alcance a observar un pequeño bulto .
El solo sonrió de manera discreta. Me miró y se cruzó de brazos. Y dijo:
- Decepcionada?
- Para nada. Contesté.
Entonces me gire frente a él. Recargue mi cuerpo sobre el mueble de mi cocina, me lleve mi mano derecha hacia mi boca chupe 2 dedos suavemente, separé mis piernas y lleve mi mano derecha hacia mi vagina, metí mis dedos mojados, comencé a acariciar mi vagina como me gusta, que para el momento ya estaba muy húmeda e hinchada. Comencé despacio, y hasta el fondo, sin dejar de mirar a mí vecino, sentía mí vagina muy hinchada y caliente, sensible, empecé a sentir esa electricidad en mi zona genital y como avanzaba por mis piernas, ese suave cosquilleo,...cambie mi ritmo, y mi respiración cambio, comencé a agitarme y se volvió entrecortada. Por un instante saque mi mano y me subí un poco a él mueble, mis glúteos se descubrieron, mi vagina ya muy mojada se embargo en la base fría de mármol, fue una sensación extraña pero muy rica. Ya arriba apoye mis talones en la orilla del mueble y comencé de nuevo a tocarme más rápido. Entonces observé que el pequeño bulto de mi vecino ya había crecido. El llevó su mano hacia su pans, metió la mano y sacó su pene que de manera inmediata acarició, suave solo a lo largo sin tocar la punta y de manera muy suave. Mi respiración comenzó a ser más rápida, ver la verga dura y grande de mi vecino hizo que mí vagina se calentará más, se volviera más sensibles. Y ese cosquilleo crecía dentro de mi. Estaba muy hinchada mi vagina, en ella crecía una guerra contra mis dedos, los apretaban mis paredes como si no quisiera dejarlos salir, pero mi mano entraba y salía de manera muy rápida. De pronto se libero un poco de energía y comenzó a salir un chorro de agua, con mucha presión, mojando mi dedos,.. Comencé a dar golpes suaves con la palma de mi mano, con cada golpe sentía como se expandía un fuerte cosquilleo, en ese momento estaba n mis labios vaginales demasiado sensibles, que con cada golpe hacia extremecer mi cuerpo. Mi vecino comenzó a mover su mano cada vez más rápido, mientras que su respiración se hacía más agitada. Después de algunos golpes volví a introducir mis dedos y continúe con la guerra en mi interior. Las sensaciones no paraban, en todo mi cuerpo había una tensión total, seguí haciendo varios minutos hasta que de pronto mi vecino corrió hacia mi, tomo mi mano sugiero a y metió hasta el fondo de manera brusca y rápida su verga muy caliente e hinchada. Sentí la presión de mi vagina para apretar ese miembro y no dejarlo salir. El llevó sus manos a mi cintura y presionó su cadera contra la mía, sacó un poco su verga y la volvía a meter presionando fuerte.
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Mi amable vecino
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Posted:Sep 29, 2018 10:19 am
Last Updated:Sep 30, 2018 10:48 pm
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Ese amanecí con ganas de tener sexo, pues ya tenía más de un año que no había tenido pareja. Entre las sábanas de mi cama estaba yo y mi cuerpo. Mi cuerpo extrañaba ser tocado, sentir esas sensaciones que produce el ser tocado por otra persona. Tenía tiempo de sobra, y la mente deseosa de placer sexual. Entre mis sábanas mi cuerpo está deseoso de ser despertado. Nostálgico, deseando ese calor interno que produce el roce de mi piel con otro cuerpo. La sensación tan placentera de un beso, el choque de mis labios con otros labios, sentir el sabor de otra boca en mi boca, la caricia de una lengua juguetona en mi lengua, esa pasión que provoca una sentir que el aliento caliente que expira la otra persona en mi boca. Que de manera inmediata vuelve mi piel sensible al roce del cuerpo del otro. Mi cuerpo sufre ésa reacción ante la desesperación corporal del otro, por sentir la satisfacción de su órgano viril que a despertado, se pone duro, caliente duro, y que hace palpitar el corazón por intentar sentir una presión, dura y al mismo tiempo suave, húmeda, caliente. Mi vagina se abre, se humedece, se contrae internamente, por la necesidad de sentir una caricia suave de la punta de un pene,.. o un dedo que la sepa presionar dentro que la haga palpitar, el toque de una lengua dentro de mi vagina deseosa de caricias la hace humedecer, se presiona para abrir y se prepara para ser penetrada, con intención de apretar ese pene que quiere salir. Mojándose por las caricias de mis dedos adentro. Mis pezones se ponen sensibles, deseosos de ser apretados, mojados, mordidos, mi cuerpo se ponía caliente, pero insatisfecho por las caricias propias,.. mis pequeños dedos dentro de mí vagina eran incapaz de acariciar toda esa zona hinchada dentro de mí vagina,.. y por más que apretada mis pezones la sensación no complacía del todo a mi cuerpo.. ya caliente, con la piel sensible... De pronto sono la puerta, y me saco de ese momento de insatisfacción propia. Me levanté de la cama, con los pechos duros, y los pezones sensibles, sin ropa interior, solo una camiseta grande, que dejaba ver en claro la caída natural de mis senos, con mi mano húmeda por mi líquido vaginal, acomode mi cabello, dejando un suave aroma de mi sexo en mi cabello. Mi cuerpo estaba un poco sudado por obvias razones. Caminé a la puerta, y la abri. Parado frente a la puerta estaba mi vecino. Un hombre maduro, alto, delgado, cuerpo atlético tez blanca, que a sus cuarenta deja ver su cuerpo musculoso atravesar de la camisa sport y su pantalón holgado. Que permitía que se marcará un pequeño bulto en su zona genital.
.- buenos días vecina, sería tan amable de mover su coche un poquito, no me permite abrir la puerta de mi garaje...dijo. o al menos eso quise escuchar, pues estaba medio aturdida, por estar en medio del proceso de calmar a mi vagina.. deseosa de una verga.. sin querer baje la mirada hacia su área genital, y creo que de manera inconscientemente, me moje los labios... Y después me los mordi.
Lo invite a pasar mientras buscaba las llaves,.. entro. Y me coloque atrás de él para cerrar la puerta. Al apretado, al fin casa pequeña. Roce de lado su cuerpo, y eso bastó para que el girará su cuerpo con intención de también cerrar la puerta. Acercándose y percatarse de mi aroma, del cual yo estaba consciente. Y que me excitó pensar que el lo fuera a percibir. Pues era más que obvio. Además que era más que obvio, que el estaba algo incómodo excitado, por mi vestimenta. Y el aroma que aún despedía mi vagina. Pues no traía ropa interior, además de estar rasurada y sudada. Y en ese preciso instante, también mojada. Caminamos hacia la sala, yo con la intención de buscar mi bolsa, para sacar las llaves del auto, el camino a lado mío. Se detuvo a unos metros junto a un sillón pues era estrecho el espacio entre los sillones y la mesa de centro. Al tomar mi abrigo, junto con mi laptop y los cables, de pronto, se dejó caer mi celular. De manera inmediata incliné mi cuerpo hacia abajo para no permitir que las cosas cayeran al suelo. Me percate que esa inclinación permitió que por la parte de atrás la camiseta se levantara y dejará al descubierto cierta parte de mis glúteos y mi vagina, que por la posición, con las piernas un poco separadas, se abría suavemente, despejando mis labios..mojado..con un poco de mi juguito embarrado, por toda mi parte intima.
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