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Noche de sexo sin control. Ayer por la Mañana nos entregaron nuestra casa nueva, me fascin, desde que entré dije es la casa de mis sueños, Javier me la regalo y desde que entre no podía dejar de pensar en mamarsela todo el día y así fue. Estrenamos todos los rincones de la casa. Me puse my Anal Plug y me dejé llevar; perdí el control, Javier jalaba mis pelos llevando mi rostro hacia atrás, mientras ligeramente me daba golpecitos en las tetas hasta dejarlas rojas, no sin pasear su índice por mi boca y meterlo hasta el fondo de mi garganta mientras me dice... te gusta perra ?? Te gusta??? Quien es mi putita??? Sus palabras me excitan más, . La sensación en mi ano cada vez más dilatado es maravillosa, empiezo a correrme como loca, mis gemidos pueden oírlos mis nuevos vecino.
Toda la tarde estuvimos en lo mismo. Cuando Javier ya no podía más simplemente se la mamaba durante varios minutos hasta que conseguí ponerlo duro otra vez y sacarle cada gota de semen. Apretando sus huevo mientras se viene en cada ocasión. Convirtiéndome en su putita personal.
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